Esta es una de las películas que más me ha gustado en lo que va del año. Es la historia de una pareja, de cómo se conoce, se enamora, se casa, tiene una hija, que se enferma...
Hemos visto muchas de estas historias, con variantes, pero en esencia las mismas. Cuando es comercial, seguro tiene final feliz o por lo menos uno esperanzador, cuando es indie no; cuando es latinoamericana apuesto a que sería un dramón; si es asiática sería un dramón, pero silencioso; y cuando es europea, tal vez no tendría ni uno ni otro final, se acabría así nomás, como una parte de la vida de los personajes; si la película es de Hallmark, bueno ya saben qué esperar. Y podría continuar, si fuera de Disney saldríamos cantando, si fuera de Tarantino, los personajes serían de lo más cool y se escabecharían al resto del reparto. Ésta tiene un final muy triste, y realmente duele mucho que no haya sido uno hollywoodense (obvio no, es solo un pensamiento fugaz para luchar contra la infinita tristeza de la peli). Pero eso se debe a lo bien que están las actuaciones y la narración. No es una de esas películas que olvidas cuando aparecen los créditos.
Él es una especie de vaquero belga que tiene una banda de bluegrass (¿así o más exótico?) y le encanta todo lo americano. Ella se dedica a hacer y hacerse tatuajes. No son bellos ni de sonrisa colgate, tampoco son comunes y corrientes. Son apasionados, intensos, se adoran, se complementan. Los actores son muy buenos y logran unos personajes complejos y bastante completos.
Didier y Elise tienen que
lidiar con la leucemia de su pequeña hija, con su pérdida. Cada uno lo
hace de maneras diferentes. Elise necesita creer que hay algo más allá.
Didier no. Eso los confronta y los pone a prueba.
La historia nos la cuentan para adelante y para atrás. Sospechamos el final, pero no importa porque el interés está en ellos, en su relación, vivimos y sentimos su alegría y nos duele muchísimo su dolor.
La música es fundamental en la narración, es fabulosa y gracias a ella las escenas importantes son aun más poderosas y conmovedoras.
Cuando terminó, calmé a mi ojo remi y me descargué el soundtrack.