miércoles, 15 de diciembre de 2010

Tangled

Me parece que las películas de Disney son como las telenovelas mexicanas, que no cambian porque no es necesario, la gente las sigue viendo y no piden novedades, así que para qué hacerlas de otra manera.

Con las películas de Disney además, como que las apapachamos, "Está buenilla" "Yo me reí" "Está muy linda" y bla, bla, bla bla. No entiendo por qué, pero no es bien visto que no te gusten, te conviertes en un amargado Grinch si dices que no estuvo buena, si te quejas de los musicales, o si dices que es lo mismo de siempre. "Pues es una película de Disney, ¿qué esperabas?" te dicen, pero no en plan crítico, sino en plan "¡Duh!, tonto". Y no se si el apapacho tiene que ver con que los niños, "sus hijos" las ven y a ellos sí les gustan (básicamente porque no tienen mucho discernimiento). Que les gusten a los niños, eso está bien (allá ellos), pero no significa que la película sea buena. "Pues si es un éxito de taquillas es que es buena" "Si a los niños les gusta es que funciona", seguro que me dirán, pero eso tampoco es garantía de nada.

Esta de Enredados (Nathan Greno, Byron Howard, 2010) es una clásica película de Disney. Con pros y contras, más sosa que otra cosa, y un pelín mejor que la del Sapo y la Princesa, sólo porque esta no es descarada en lo políticamente correcto. Aunque los personajes secundarios (las polillas y el cocodrilo trompetista) y la música de esa están mucho mejor que las aburridísimas canciones de Enredados. Digo, si ya la van a hacer musical, pues que lo hagan bien, ¿o no? A mí como que sí me gustaban las tazas voladoras y los trapeadores danzantes. Se extraña de repente una buena coreografía. La Espada en la Piedra tenía varias, La Bella y la Bestia también, ¡uy y qué decir de los números musicales de Hércules!

La historia es la de Rapunzel, no hay más que decir. No está modernizada, no tenemos a una princesa que quiere ser profesionista, o que es feminista, tampoco que quiere tener hijos y ser feliz. Rapunzel es simpática, tiene su carácter y demuestra ser muy competente. Flynn Ryder también está bien, me gusta la idea de que no es ni macho, ni más listo, ni más fuerte, ni más nada, es un "igual" y los dos descubren sus fortalezas y debilidades con naturalidad y las aceptan sin juicios ni dramas. Una gran ventaja de la película es que no hay momentos emotivos de sha la la, y la reunión con los padres es en silencio.
Pascal está muy bien, pero no es oscareable, Timón y Pumba son muy superiores.
La mala, que se parece por cierto, a Cher, debería de irse "maleficando" poco a poco.
Tanto cabello, me dio ñañaras y creo que podía haber sido mejor explotado. Además, me distrajo su capacidad de crecer y decrecer.
Acepto que la escena en la taberna está chistosona, obvia, pero chistosona. Deberían de pensar en una película para esos gandules. Creo que tienen potencial. Y el "querubín" bueno, ese no tiene madre.
El caballo Maximus tiene su encanto, pero a mi me ganó el sartén.

Lo que más me gustó fue el aspecto visual de toda la película, los escenarios, la luz, los colores. La torre de Rapunzel en la cañada y la escena del lanzamiento de las linternas son visualmente apantallantes. Tienen un carácter pictórico poco frecuente que me remiten a las películas de Hayao Miyazaki.

Y como dato particular para los que la ven doblada (no hay más opción, de hecho) el doblaje no me gustó nadita. No se por qué tenían que contratar a Chayanne para la voz, es muy distractor que no tenga un "castellano" neutral. Y la Rapunzel, pues como que tampoco le sale. Eso de contratar celebridades para hacer las voces no me convence. Teníamos buena fama en el doblaje, hay profesionales de eso. ¿En qué mejora que la voz sea la de la tipa de Patito Feo (creo)? ¡o la de Chayanne!

En fin, al parecer no soy un elemento Disneyano. Aunque me gusta mucho la de Robin Hood y Mulan es mi heroína preferida (¿será porque no es princesa y tiene una espada?).

viernes, 26 de noviembre de 2010

RED

La plácida y monótona vida del exagente de la CIA Frank Moses se ve drásticamente interrumpida cuando un misterioso grupo de hombres intenta asesinarlo (¿cuántas balas se necesitan para destruir una casa típica gringa?). Frank (Bruce Willis) empieza a investigar las razones del ataque y busca la ayuda de su antiguo equipo, Joe (Morgan Freeman), Marvin (John Malkovich) y Victoria (Helen Mirren). Estos, junto con un antiguo rival de la KGB, Ivan (Brian Cox) y de Sarah (Mary-Louise Parker), el interés amoroso de Frank, averiguan que es la misma Agencia quien los quiere eliminar. El grupo se infiltra en las oficinas de la CIA y se topan con un gran encubrimiento gubernamental que tiene que ver con el pasado de estos agentes y de todo el equipo que participó en la masacre de una aldea en Sudamérica años atrás.

Como dicen por ahí RED (Robert Schwentke, 2010), es todo lo que se supone que los Expendables tenía que haber sido. Cuando se anuncian películas con un gran reparto, todos nos saboreamos de la emoción, y los resultados suelen ser decepcionantes (con en los Expendables). En el caso de RED, el reparto es fabuloso, y cumple cabalmente con las expectativas.
¡Qué gustazo ver a John Malkovich en ese papel! Qué divertido y qué diferente de esos densos personajes en los que se ha especializado.
¡Uy! Y Helen Mirren con veta cómica es fantástica. Que se de el lujo de aceptar un papel así siendo la Reina de las actrices...(aunque Meryl no esté de acuerdo, la Mirren es superior).
Mary-Louise Parker también está requete bien en su papel de morbosa/curiosa víctima ávida de una vida más interesante. Y qué decir de Bruce Willis y de Morgan Freeman. Willis cumple con el papel de "action hero" que tan buena fama le ha dado y Morgan Freeman, pues es Morgan Freeman y se le puede ver hasta de Dios, es como el "gran consen" de la pantalla grande.

La historia es lo de menos, el que esté basada en un cómic también, son los actores y los diálogos los que merecen la pena. Es Helen Mirren de francotiradora, Malkovich vestido de mujer, Mary-Louise Parker hablando hasta por los codos; son divertidos, "están" divertidos, las situaciones son absurdas, exageradas y funcionan muy bien.

Scott Pilgrim contra el mundo

Scott Pilgrim es un nini canadiense que toca en una banda de rock amateur con aspiraciones de triunfo. Está saliendo con Knives Chau una niña de secundaria cinco años menor que él, y recibe las burlas de sus amigos y su hermana. Pero salir con ella es fácil y además aún no ha superado el haber sido cortado por su ex que es ahora una rockstar. Y entonces conoce a Ramona Flowers, la nueva y misteriosa chica del barrio. Pero salir con Ramona tiene sus consecuencias y no son solo los líos de salir con dos chicas al mismo tiempo. Resulta que para poder andar con Ramona tiene que vencer a sus 7 exes malvados.

De ahí el espantoso, pero nada sorprendente título que le pusieron en español (me gustaría visitar el departamento de titulaje de películas en español para averiguar porque no ponen los títulos tal cual son) "Scott Pilgrim vs. los ex de la chica de sus sueños" (así largote y que diga de lo que se trata la peli, por si no entiende la gente).

La historia está basada, de manera bastante fiel por lo que pude ver, en el cómic, pero además le da una dimesión cinematográfica y combina elementos del cómic, como las onomatopeyas que aparecen flotando en la película y que a veces la pantalla se rompa en cuadros y que parezca página de cómic o que los recuerdos de Ramona sean los dibujos del comic original. También combina de manera muy acertada, elementos de los videojuegos, como cuando vence a sus oponentes y caen monedas y sale la puntuación o cuando empiezan los combates y se ponen en posición y en medio sale un vs. justo como en los juegos de luchitas. Y bueno, ni qué decir de la barra de pipí.

Fue toda una sorpesa ver esta película. No tenía ningúna información más que era un cómic y que salía Michael Cera. Temía un poco su presencia pues Michael Cera siempre la hace de Michael Cera, pero en esta ocasión le sienta muy bien y es el actor ideal para ese personaje (claro, no he leído el cómic así que no puedo decir si le sienta bien al Scott Pilgrim original). Me gustó mucho la combinación de medios y estilos, diálogos, y la sucesión de acontecimientos extraños. El ataque inicial me tomó por sorpresa, el baile de las chicas vampiro con el ex hindú, el ex que salió de la universidad vegan, la corta y divertida aparición de Chris Evans, en fin.

Para adaptaciones de cómics, creo que esta es muy positiva. Es más creo que me gusta más la peli que el cómic, que no lo he leído porque el estilo de dibujo no me atrae mucho. Esta hecha con muchas ganas, con mucho sentido del humor (algo le sabe el director a eso siendo el que hizo "Shaun of the Dead" y "Hot Fuzz").

Así que en conclusión, Scott Pilgrim vs. the World (Edgar Wright, 2010) es una película entretenida, hecha con ganas y muy recomendable.

Machete

Esta película es parte de un conjunto de ideas que me gustó mucho desde que empecé a escuchar sobre ellas. El concepto de "Grindhouse" me encantó; dos pelis con intermedio y trailers falsos como una función de cine de antes. El resultado no estuvo a la altura y aunque muchos no estén de acuerdo, a mí me gustó más Planet Terror que la de Tarantino "Death Proof" (y eso que soy fan, o tal vez por ser fan, prque no estuvo a su altura en el humor, los diálogos ni nada). Y lo que más más me gustó, además de la tipa con la pierna de metralleta, fue el trailer de Machete. De todos, este me pareció que ya era una película de verdad. Y fue un gusto saber que ese era el sentimiento generalizado. Y que a Robert Rodríguez le interesó la idea lo suficiente como para escribir el guión completo y hacerse de un reparto de lo más llamativo.

Desde hace unos meses ya se podía ver el nuevo trailer, parecido al apócrifo, pero con un mensaje al gobierno de Arizona por parte de Danny Trejo. Este trailer no fue oficialmente aprobado por incorrecto y se le ha llamado el trailer "ilegal". Y aunque está más afinado, menos ochentero y con el reparto final, el trailer original me gusta más.


Machete (Robert Rodriguez, Ethan Maniquis, 2010) llega finalmente a las pantallas (en mi caso a la de mi computadora porque los cines locales apestan con la programación) y puedo decir que esta tormenta de ideas que inició como homenaje a las películas de serie B hace más de tres años, cerró con broche de oro.

Danny Trejo en su primer papel protagónico, es Machete, un honesto ex federal mexicano, que tras la muerte de su familia a manos de un malo maloso Steven Seagal, en plan jefe narco que mata con su katana (tan lejos del intachable Nico), se va de mojado a USA. Un misterioso ricachón lo contrata para que elimine a un reconocido senador (Robert De Niro). Machete acepta y cuando está a punto de disparar, le disparan a él. Todo resulta ser parte de un plan para incriminarlo, aumentar la paranoia contra los ilegales y cerrar las fronteras. Hay muchos malos involucrados y todos tienen sus propios planes, los que ven el cierre de las fronteras como un negocio, los que lo ven como una manera de defender su patria. Pero la Red de ilegales se une, y junto con Machete, Michelle Rodriguez y Jessica Alba, se preparan para acabar con todos los que los amenazan, incluidos Steven Seagal y su katana.

Qué "perfect timing" para mostrar esta película en estos tiempos. Y aunque el tema tan polémico está ahi muy presente y con una postura muy clara, la película no cae en solemnidades, ni alecciona, ni nada de eso. Es una desatadura total, con escenas tronchantes, sangre, balazos y matazones a todo pasto. La escena del hospital con Machete bajando por el edificio (no diré el spoiler, aunque me muero por comentar el punto con alguien, pues lo ocurrido fue totalmente inesperado y sorpresivo. ¡Ups! Tal vez con esto se les pueda quitar la sopresa); los carros mexicanos en el enfrentamiento final, coloridos, armados hasta los dientes y con ese sistema en el que suben y bajan, que es muy chistoso y creo, inútil; Lindsay Lohan de monja, bueno toda su presencia en la película es divertida y no porque ella sea divertida, sino lo que le ponen a hacer.

Me parece que Robert Rodriguez tiene aquí una de sus mejores películas, un perfecto balance de acción, humor y violencia, en una historia sencilla y atractiva, con un reparto que decide participar, arriesgarse y divertirse.

Haciendo un recuento y sin contar las que son para niños (que de esas me quedo con Lava Boy y Shark Girl), creo que ésta y El Mariachi (junto con su versión más pudiente Desperado) son mis favoritas.

miércoles, 20 de octubre de 2010

The Good Heart

Un Buen Corazón (Dagur Kári, 2009).

Lucas (Paul Dano) y Jacques (Brian Cox), se conocen en el hospital. Lucas está ahí por un suicidio fallido y Jacques por su quinto ataque de corazón. Lucas es un "homeless" tranquilo, amable y de buen corazón; Jacques es el dueño de un bar, es cascarrabias, grosero, con un corazón defectuoso. Y sin embargo, decide acoger a Lucas y prepararlo para dejarlo a cargo del bar cuando él muera.

Disfruté mucho esta película. Es algo extraña. Ocurre en Nueva York, pero es un NY, diferente, un poco ruinoso y abandonado, con personajes extraños, aislados y un poco ruinosos también.



Desde el principio y sin saber por qué, notaba que el ambiente, que los personajes, que Nueva York eran distintos y creo que se debe al director de origen islandés, Dagur Kári y a su equipo de producción. Es una mirada europea (¿o más bien islandesa?) y poco típica (porque tampoco es la mirada de un migrante, o de una película indie), de un ambiente americano. Y me gustó. No todo fue filmado en NY y no es sobre NY, pero si han visto pelis en NY, se darán cuenta de que esta tiene otro sabor.


Las actuaciones, sobre todo la de Brian Cox (que se lleva la película), son muy buenas. El guión y los diálogos también. Hay escenas y diálogos divertidos, como el del brócoli y los pedos (obvio, mi favorito). La historia es sencilla, se apoya en la relación entre los personajes y en la manera de ser de cada uno. Temía que Paul Dano fuera como su personaje en "Petróleo Sangriento", que era medio "creepy", pero no. Sigue siendo unicara, pero esta vez fue una unicara agradable. Y repito, Brian Cox está formidable.

domingo, 3 de octubre de 2010

Good Hair

Este es un documental que habla sobre un tema que me resultó fascinante por desconocido. Trata sobre el cabello de las mujeres negras, sobre los que significa tener un "buen cabello", y sobre la industria millonaria alrededor del cabello de las mujeres negras (sobre todo de las mujeres, aunque hay hombres que también le entran al asunto).
Todo empieza cuando a Chris Rock le pregunta su hija de cinco años que por qué ella no tiene "buen cabello", osea que por qué su cabello era chino y difícil de peinar y no lacio y maravilloso como los anuncios de Sedal. Chris se pone a la tarea de averiguar el significado de tener un buen cabello y todo lo necesario para lograrlo. En su investigación nos adentra a un mundo misterioso y completamente ajeno, a menos que tenga usted el pelo chino chino a lo negro y le cueste trabajo peinarlo.

Resulta que el afro está pasado de moda y es cero "cool". Tener un buen cabello significa tenerlo lacio (de baba), a la europea (a la europea clásica, eh, no a la europea migrante). Creo que el cabello asiático también es envidiado y el hindú es muy útil para sus extensiones y pelucas. No sé porque han ignorado el pelo latino, es grueso y peinable, ¿que, no?

Good Hair (Jeff Stilson, 2009), es básicamente sobre la insatisfacción de las mujeres negras con su cabello y lo que están dispuestas a gastar (¡y gastan!) para tener un buen "look". Existe un producto llamado Relax, una crema fuertísima compuesta de Hidróxido de Sodio (Sodium Hidroxide, me parece, pero no me tomen del todo en serio, no vaya a ser que quieran buscarlo y se pongan otra cosa en la cabeza) que les alacia el cabello. Pero la crema esa ¡QUEMA! Hasta un científico demuestra cómo deshace una lata de cocacola en poco tiempo. No sé, pero someterte a algo así...

Otra de las soluciones comunes a los peinados es el uso de extensiones (Weaves, me imagino que es lo mismo o por lo menos un equivalente). Todas las entrevistadas famosas, menos una, llevaban extensiones. De aquí salen las escenas más divertidas del documental cuando les preguntan a los hombres sobre sus relaciones con mujeres que usan extensiones. Uno de ellos dice que es más fácil salir con una mujer blanca porque dan menos lata en ese sentido. Y es que ¡no pueden tocar la cabeza!
¡Uff! y los precios que se pagan por estas extensiones. Una muchacha que iba a entrar a la universidad pagó 1000 dólares por sus extensiones. Y seguro que no era una de la mejor calidad. La principal industria viene de la India. Toda esa parte en la India es bastante interesante, no contaré detalles para que vean la película.

Contaré a cambio mi parte favorita. La parte de la competencia "Hair Battle Royale". ¿Así o más gringo? Cada año en, no recuerdo dónde, hay una enorme feria de productos de belleza. En esta feria se lleva a cabo esta alucinante competencia (alucinante en el sentido más burlón y negativo del concepto, aclaro). Cada año, los mejores peluqueros del país compiten para ganar el premio al mejor peluquero. Hay un jurado especializado, distintas competencias y los competidores se preparan arduamente para presentar el show más impactante y original. Es tronchante, lo de menos es si cortan bien o no, el chiste es cortarlo estando de cabeza, dentro de un tanque con agua, rodeado de monas en bikini o con una banda de música como acompañante. Atención especial al ganador.
Sólo por ver esto vale la pena la película.

Sin embargo, me parece que se queda ahí en una curiosidad, en una "chuscosidad". Y no va más allá, en el asunto de la moda, en los asuntos de autoestima, los gastos de manutención de algo que no sé si realmente vale la pena (yo por eso digo que deberíamos todos de ser pelones, sería más fácil). Claro que yo no sé lo que se siente. El mío no es "Good Hair", pero es peinable...en teoría (y en el salón).

Esto del cabello, al parecer sí que es un problema, me acabo de enterar en noticiero; si ya de por sí los niños cuando crezcan van a tener un montón de "issues" ¿para qué agregar uno como el del tipo de cabello, que a la larga va con el de la raza y se complica si se une al color de la piel y etc., etc.?
Aquí un link a un video de Plaza Sésamo en donde hablan sobre este asunto:
http://www.youtube.com/watch?v=enpFde5rgmw&feature=player_embedded

Giallo

Giallo (Dario Argento, 2009).

Nunca he visto una película de Dario Argento, pensé que sí porque las reconozco, pero no. Así que vi la última. Más que nada porque sale Adrien Brody.
Y como nunca he visto una, y no he leído nada sobre él ni su trabajo, no sé por qué es famoso. No sé si es que sus películas de terror son muy terroríficas, o porque es muy chafa, o porque están llenas de humor.
Pues ésta de Giallo, es muy chistosa. Es un thriller policíaco. Adrien Brody es el clásico poli solitario con un pasado traumático que lo ha hecho especializarse en asesinos seriales. Un día Emmanuelle Seigner lo busca porque su hermana ha desaparecido. Ellos no lo saben aún, pero ha sido secuestrada por un tipo traumado porque es feo y está amarillo (giallo), que se dedica a matar chicas guapas. En fin, hasta ahí la historia es cualquier cosa, nada que no hayamos visto antes.



El plus aquí es que hay mucho humor (involuntario, probablemente). El malo se parece mucho a la bruja de Blanca Nieves, y además cojea y habla mal. Osea, no bastaba con ser amarillo por un problema del hígado, no, tenía que cojear, hablar como retrasado, tener una nariz enorme y un peinado de rockero ochentero (wtf!). Pero su actuación es de lo más divertida, de hecho todas las escenas en donde tortura y se escabecha a las chicas son recagadas. Close-ups a los ojos desorbitados de las víctimas, la sombra del tipo en la pared cuando se acerca para matarlas, los chisguetes de sangre y por aquí y por allá, la clásica toma dramática desde abajo cuando levanta el hacha o el serrucho y la música de chan chan chan chaaaaan. "Kiss kiss no more" les dice cuando les va a cortar los labios con unas tijeras para podar.

Alguna que otra toma es como una mala copia de una película de Hitchcock, pero sin el encanto. De hecho parece una película de estudiante o de "paint by numbers". Va paso a paso palomeando todas las características de las peliculas de suspenso:

-Policía rebelde que trabaja con métodos poco ordinarios (palomita. Aunque esta deja mucho que desear porque nunca vemos los métodos poco ordinarios).
-Larga persecución de la pobre víctima que apenas puede mantenerse en pie (palomita. Esta también es cuestionable porque no es claro por qué apenas puede caminar).
-Un montón de miradas intensas por aquí y por allá, alguno que otro grito (sacados de "Efectos de sonido para thrillers" vol. 2) y unos cuantos golpes y disparos (palomita).
-Música de "Música para thrillers" vol. 6 (palomita).
-Locación misteriosa, laberíntica y de preferencia cochambrosa (palomita).
-Flashbacks de infancia que explican por qué son como son y hacen lo que hacen (palomita).
-Detalle tonto y oscuro que resuelve el misterio (palomita).
-Tensión sexual entre los protagonistas buenos (palomita).


El final es lo mejor (la parte del charquito de sangre, no la de que los protagonistas no acaban juntos, aunque eso sí que fue una sorpresa).

No sé a qué se deba sin embargo, que la película es entretenida y puede uno verla perfectamente sin irritarse, sin cuestionarla en exceso, y pasar un buen rato.

Películas para el Bicentenario de México Cuarta Parte

El Infierno (Luis Estrada, 2010).
Benny García (Damián Alcázar) es deportado después de haber pasado 20 años en Estados Unidos. Regresa a su pueblo natal "San Miguel "N"arcángel" que está aún más en el hoyo que cuando lo dejó. Pueblo rascuache, desolado y polvoriento, cuya única zona con movimiento parece ser la zona roja, tan pinchona como el resto del pueblo. Esto me resulta muy confuso porque el pueblo está a un pelín de ser pueblo fantasma, poca gente en las calles, los comercios han cerrado por la crisis, los narcos imponen miedo, no hay trabajo, y sin embargo es el pueblo de los narcos de la región. ¿No debería de ser más próspero? ¿No se supone que los narcos dan trabajo a los locales? Si está tan decadente ¿a quién le vende droga la viejilla de la mercería? Como digo, confuso.
Benny está desconcertado con la situación, pues esperaba comenzar un negocio de clases de inglés. Su padrino, dueño de una destartalada vulcanizadora, lo pone al día sobre los aconteceres del pueblo y sobre la muerte de su hermano, noticia que le ha impactado mucho. Su hermano, conocido como El Diablo, había sido un narco de respeto en la región y nadie sabe quién lo mató.
Aunque promete no involucrarse él también en esos negocios, pronto se da cuenta de que no tiene otra opción para ayudar a su familia. Con la palanca de su cuate de la infancia "El Cochiloco", entra a formar parte de la familia Reyes, una de las dos familias que controlan la región. Que eran una familia de dos hermanos que se pelearon y ahora pelean por el control de la plaza.
Después de unas cuantas fuertes impresiones sanguinolentas, el Benny se va adaptando al nuevo estilo de vida, a los fajos de billetes, a la "buena ropa". Se queda con la viuda de su hermano, cuida a su sobrino y les promete que esto no será para siempre y que en cuanto ahorre un poco más se los lleva al otro lado. Y obvio que esto no ocurre así, que las cosas se complican, que la mitad del elenco se muere a manos de la otra mitad y que no hay un final feliz.
Hay mucha sangre, balazos y violencia (no me asusta, pero las cabezas rodantes sobran). Y se supone que hay comedia, pero no mucha. Y la que hay es más bien de pastelazo y no negra e inteligente que es la que yo esperaba. Los narcos son una caricatura ridícula, son ineptos, estúpidos, y bastante de quinta. ¿Y que onda con sus negocios de pacotilla? ¿Que no se supone que el Cochiloco estaba bien parado en la organización? ¿Qué es eso de vender drogilla en moteles de carretera?
El capo (un Ernesto Gómez Cruz sobreactuado, sólo superado por su prpopia actuación como el hermano) se supone que es rudo y macho, poderoso que se ha codeado con las altas esferas, pero en una escena bastante mala se nos hace ver que quien lleva los pantalones es la mujer (¡¡¡argh, María Rojo!!!! ¿Quién aguanta a esta señora? Diganle que se retire, por favor!). Damián Alcázar sale de menso y la hace bien porque es buen actor, pero hizo una extraña fusión de su personaje de la Ley de Herodes con Tintán (¡pobre Tintán!). El Jr., es una burla inútil. Los oaxaqueños que mandan llamar porque son más chingones, no entedí por que tenían que ser oaxaqueños (¿sólo para que hablaran una lengua que nadie más entendiera?). El personaje que me pareció mejor fue el Cochiloco (aparte de estar bien actuado). Él es el único que da la impresión de entender mejor las cosas. Es el único que no se la cree y que lo hace porque tiene que mantener a su familia (claro que si ya eres algo inteligente para darte cuenta de eso, bien podrías cambiarte de casa y buscarte una chamba menos riesgosa). Lo desaprovechan a fin de cuentas.
Las escenas más cagadas son las que muestran la naquez de los narcos, el despacho del capo, el mal gusto por la ropa, el asunto con la tumba (esa escena está chistosa, lo acepto), pero la película no se supone que se trate de eso. Pretende ser una comedia ácida que refleja una realidad de México, una realidad muy gruesa, y no lo hace. Es tan ridícula que pierde distancia con los que vemos y oímos en la tele, en internet, en los periódicos.
Una de las cosas de la Ley de Herodes es que aunque fuera comedia, aunque estuviera un poco exagerada, uno se quedaba con la sensación de familiaridad. De que había potencial un Juan vargas cerca de nosotros.
Pero aquí, el narco parece ser una cosa aislada, sólo de ese pueblo, no se resalta su alcance, su poder, su fuerza. Caen en puros comentarios estereotípicos, que si por la crisis y el mal gobierno no me queda otra que trabajar para el narco, que obvio que tooooda la policía es corrupta, y bla, bla bla. Y no, mi opinión no es un caso de ofensa, de que México no es sólo eso, de que por qué sólo se retrata lo malo, no no, para nada. Tampoco tiene que ver con que se maneje este tema en plan comedia, eso me encanta. No, mi opinión es resultado de una decepción, de que esperaba más del director, de la historia, de todo!
Para humor negro del narco, mejor cliquéen este link de The Onion:
http://www.theonion.com/articles/mexico-killed-in-drug-deal,18109/
o para acción entretenida léanse el Poder del Perro de Don Winslow.
Y alguien dígame ¡¿Por qué rayos sale Daniel Giménez Cacho con esa cabellera?!

martes, 28 de septiembre de 2010

Anvil! The Story of Anvil

En 1984 cuatro grupos de Heavy Metal dieron un concierto en Japón. tres de ellos, Scorpions, Whitesnake y Bon Jovi, vendieron, a partir de ahí, millones de discos. Anvil no.

Este grupo canadiense influenció a muchos músicos, incluidos Slash y Lars Ulrich, y sin embargo no se hizo famoso. Veintitantos años después el líder "Lips" Kudlow y el baterista (y amigo inseparable de Lips) Robb Reiner, llevan una vida común y corriente, uno de ellos trabajando en una empresa que lleva comida a las escuelas y el otro en la construcción.

¿Por qué no les fue tan bien como a los demás? ¿Cómo es que no se hicieron rockstars si tenían todo para serlo? Nadie lo entiende. Sus familiares, amigos y fans se lo preguntan. A nadie le queda duda de que son talentosos, perseverantes y luchones; que saben actuar en el escenario y que además, tienen buena música.

Este es un pedazo de su historia. Veinte años después siguen con su banda, practican en el garage y han publicado 12 discos. Tiene un par de fans que los siguen fielmente. Pero no hacen giras, tocan en un bar y se han convertido más bien en una banda de culto, en una leyenda.

Un día son contactados por una italiana admiradora que les ofrece ser su manager para una gira en Europa. Aceptan gustosos. La gira tiene sus altas y sus bajas, a la larga resulta más un desastre que un éxito y no ganan nada de dinero. Pero ahí están, con la mejor actitud. Encontrándose con músicos famosos que los admiraban cuando eran chicos, con fans de todos los tipos, en auditorios medio vacíos y antros de mala muerte en sótanos perdidos.
Esta es mi parte favorita de la película.

En un último intento por lograr ser conocidos, deciden grabar un nuevo disco, el número 13. Se dan cuenta de que cuando mejor les fue fue cuando trabajaron con unos de los mejores productores del medio, Chris CT Tsangarides. Lips le envía un demo del disco y este les dice que tiene potencial y que le gustaría trabajar con ellos, pero que necesitan juntar como 12,000 dólares. Nadie tiene dinero, tratan de juntarlo pero está difícil. Una hermana de Lips decide prestarle el dinero. Esta es una de las escenas más conmovedoras de la película: La hermana, mayor que Lips, bien vestida, muy propia y Lips con su look de rockero ochentero (pelo largo y flequillo) de negro con bermudas, diciendo que aunque no entiende su música, lo quiere, lo respeta y sabe que es bueno y que merece esta oportunidad.

Viajan a Dover, Inglaterra y pasan ahí unas semanas grabando el disco en un estado emocional muy delicado. Se pelean, se encontentan. Son los mejores amigos, y han estado juntos desde que se conocieron a los 14 años. El disco es bueno, todos están satisfechos, regresan a Canadá y tratan de colocarlo en una disquera, pero no hay interesados. ¿un problema generacional? Nadie lo sabe. Al final acaban produciéndolo y vendiéndolo por internet a sus fans. No era lo esperado, pero su actitud es admirable. Al menos lo hicieron y es bueno.

La película termina con una invitación a tocar a Japón. Un gran cierre para una gran película.

Anvil! The Story of Anvil (Sacha Gervasi, 2008). Es una muy buena película. no soy metalera para nada, pero eso es lo de menos en la historia. Lips y Robb son unos personajazos, con ese look amenazante, se tranforman en el escenario, cantan canciones de esas que casi no se entiende nada, sus discos tienen siempre yunques y son portadas bien clásicas metaleras. Y en casa unas linduras, amables y cariñosos, sensibles.


Y la peli es emocionante, emotiva, graciosa.

Me chocan las películas levantadoras del espíritu, las películas que dejan enseñanzas de vida y jaladas de esas. Lo que me choca es que las venden así y que la gente las compra por esa única razón. Pueden apestar, pero "Ay, que lindo mensaje". Argh! No la quiero etiquetar de esta manera, pero esta peli deja un buen sabor por el espíritu, por la actitud de lo protagonistas, que no se rinden, que siguieron tocando y evolucionando musicalmente durante 20 años. No es una peli de final feliz al estilo Hollywood, las cosas siguieron sin salir del todo bien, no se convirtieron en Rock Stars, ni salieron de sus deudas, probablemente siguen en sus mismos trabajos. Pero esa es la historia de la mayor parte de la gente. Hay siempre más talento y más gente capaz de la que sale en la tele. Y nos son "losers" por no haberla armado, sepa por qué no tuvieron el éxito merecido, pero ahí están y siguen trabajando y haciendo lo que les gusta.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Películas para el Bicentenario de México Tercera Parte

Hidalgo. La historia jamás contada (Antonio Serrano, 2010).

Un capítulo de la vida del cura. Según los involucrados en la película, la idea era desmitificar a Hidalgo. Mostrarlo más humano, con sus intereses y pasiones, su lado oscuro, su lado jocoso, y bla, bla bla.

Me parece que tanto el título, como la frasesita ,"los secretos de un hombre callados por el grito de un héroe", y el cartel, pretenden una cosa muy distinta al resultado final. Porque su enfoque parece muy solemne. Yo me imaginaba un periodo muy comprometido de su vida o uno en donde vio la luz y en donde se empezó a formar como el hombre-héroe conocido por todos. O como por ahí me comentaron, una especie de reflexión del personaje y de la historia en estos festejos patrios.

Pero en esos aspectos me parece que se queda corta. La historia se centra en la etapa en que a Hidalgo lo mandan de párroco a San Felipe Torres Mochas por progre y problemático. Da la impresión que es el periodo más feliz de su vida. Le caen sus hermanos, organiza tertulias y fiestas con música prohibida. Las beatas y el otro párroco lo alucinan. Ayuda a los maltratados y abandonados indígenas de la zona. Monta el Tartufo, un poco para provocar, un poco para cuestionar y un mucho por diversión. Y lo más importante, se enamora de Josefa Quintana.

Esta parte, que es la mayor de la película, está muy bien, divertida, activa. El reparto funciona muy bien. Cecilia Suárez como Amadita, está genial, el que hace de José Quintana también, las beatas, el pariente, y todos en general. Las escenas relacionadas con la obra de teatro, son divertidas y la del estreno de la obra es de las mejores. ¡El Bichir está contenido!
También me gustaron las escenas con los músicos, y la música de toda la película me gustó mucho. Qué mejor cierre que la canción de los créditos con la voz de Lo Blondo. Las locaciones, el vestuario y todo eso que indica la época, me parecieron muy acertados (no soy conocedora, pero funcionan en el contexto y no sobresalen, ni por exceso de diseño ni por confusión temporal). No sé qué tan apegada o no está a la realidad, pero no importa porque todos los elementos dan una atmósfera y un entorno congruente.

Ahora vamos a lo que no me gustó de la película, que es todo lo demás. Espero darme a entender porque me ha resultado difícil aclararlo. La parte de la estancia en San Felipe, es una buena película comercial, ligera, entretenida. Pero no importa si es Hidalgo o no. Y de hecho no hubiera estado mal que no fuera Hidalgo. Creo que ya hubiera sido suficiente con un personaje que es sacerdote, tiene hijos e ideas diferentes a las de sus superiores.

El unirla con la parte histórica que ya conocemos me suena más a justificación. Una justificación para esas razones que comentaba yo al principio.

La historia contada en flashbacks desde la cárcel de Chihuahua en donde Hidalgo pasa sus últimos días, no viene a cuento. Y mucho menos, los interrogatorios, el otro triste flashback (en donde sale Plutarco Haza por 30 segundos), y el fusilamiento.

Al final Hidalgo recuerda sus días más felices, y eso está muy bien, pero no tienen nada que ver "el grito", la independencia y todo eso. Con esta historia a mí no me queda claro que Hidalgo tomó conciencia en este periodo de su vida. Él ya era así desde antes. La desigualdad, la cerrazón eclesiástica y todo eso, no le caen de sorpresa en San Felipe. En realidad la única conclusión a la que llega ahí es que necesita un descansito de ser sacerdote.

Aunque no lo parezca, encuentro la película más positiva que negativa. El relleno me gustó bastante y podría imaginarme una especie de franquicia, a la gringa, de nuestros próceres. Imagínense otra con Morelos, o con Allende antes de encontrarse con Hidalgo en el camino. Una serie de precuelas o una de esas sagas de juventud tipo Smallville. Parece broma o sarcasmo, pero no. Honestamente, creo que algo así sería entretenido. Alteraría muchos solemnes y respetuosos corazones, eso, seguro.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Películas para el Bicentenario de México Segunda Parte

El Atentado (Jorge Fons, 2010).
Arnulfo Arroyo (José María Yazpik con un extraño tono de voz que aparece y desaparece) es un borrachín contratado por misteriosos personajes para matar a Don Porfirio. Por razones tan misteriosas como los personajes, a la mera hora le sacan el arma del saco y Arnulfo, borracho y desarmado, falla. Lo meten a la cárcel, lo interrogan, lo golpean y finalmente, lo matan.

Me cuesta un poco de trabajo explicar de qué se trata la película sin tener que contarla toda porque está llena de tramas, complots y maniobras políticas y porque hay tres personajes principales unidos por el pasado y por una mujer. Son esos tres del cartel, Daniel Giménez Cacho, el Poeta, Julio Bracho, el Jefe de la Policía, Yazpik, el Anarquista (quesque, porque ni se nota tanto, sólo porque canta una cancioncita) y La Discordia es Irene Azuela. Y bueno también porque al contármela yo misma me doy cuenta de que no hay nada que contar. Pasa mucho y no pasa nada. Los que planean el atentado resultan unos miedosos, que después del fallo ya no saben qué hacer; muy poco profesionalismo, vaya. Y luego el que hayan escogido a Arnulfo no se sabe si es por venganza, celos o qué, porque definitivamente no es por sus habilidades como asesino a sueldo. Y si es porque era un archireconocido anarquista que iba a resultar útil para desviar la atención del verdadero motivo, pues tampoco queda claro. El personaje de Giménez Cacho que pareciera al principio funcionar como el eje unificador de las diferentes historias, se queda en un espectador a medias, desinteresado y calenturiento.

La historia es tan vaga y confusa que lo lleva a uno a pensar distintas opciones que nunca ocurren. De repente parece que todos eran parte del complot; de repente cree uno que eran muy unidos (esto es culpa de los flashbacks malusados) y que algo los separó (¡la tipa, seguro que fue la tipa esa!) ; o que fueron los ideales (el poder, la injusticia, el dinero). Pero no es nada de esto, o tal vez sí. ¿Quién lo sabe? A mí no me quedó claro.

No he logrado averiguar el costo de esta película. Unos chismes dicen que es la más cara de la historia (en México, claro), otros dicen que fue la de Chicogrande. Por los patrocinadores que aparecen consentidísimos al principio de la peli, por la cantidad de extras, vestuario y producción en general, pensaría que es ésta. En general, esto no suele interesarme, pero en este caso me lo pregunto porque si tenían tanta lana ¿por qué no gastaron un poco en el guión, en el argumento?
Hay diálogos muy forzados, actuaciones acartonadas, con una que otra palabreja que a mí como que no me checa del momento (recuerdo ahorita la palabra terrorista ¿se usaba?). Las escenas del teatro de carpa medio funcionan, pero se quedan al final en calidad de gratuitas. Y como que de repente el director quiere poner toques de humor, que no quedan del todo claros, como con las reacciones del público en el momento del atentado.¿Y qué onda con el Porfirio rígido y chistoreto?

Una cosa que me divirtió fue que salen como tres cuartas partes del gremio actoral mexicano. De esos actores reconocibles de todas las pelis y las telenovelas, pero que no son tan protagónicos. Y bueno, sale María Rojo, ¡uff! por suerte como 3 segundos porque me pone nerviosa; 3 segundos en los que se las ingenia para sobreactuar, por cierto. ¡Ja! Y hay una escena medio aterradora con los ojos de la hermana de Arnulfo.

La dirección en general es bastante mala, un guión sin foco, una escenografía falsa que "tal vez" sea una cuestión estilística, pero que resulta estorbosa, actuaciones desiguales y un montonal de escenas y personajes que no se acaban de desarrollar y se convierten en paja pura (como la novia de Arnulfo, el reportero joven, y hasta la misma Discordia).

Este deber patrio me está resultando tortuoso. ¡Pero sigue El Infierno! Esa es la que más expectativas me genera.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Películas para el Bicentenario de México Primera Parte

Empezamos septiembre y los estrenos del Bicentenario por fin aparecen. No crean que me muero de ganas de verlos, tengo una curiosidad tibia, digamos. Pero de todos los festejos planeados, este es el único en el que voy a participar. Los costos de los proyectos que no van a estar a tiempo me escandalizan y no creo que el año que se ha vivido en México amerite festejo alguno y menos éste. Después de cien y doscientos años, así estamos. Si hubiera sido un año pinchón, medio grisáceo, bueh, va, vamos al Grito. Pero en este año... nel.

En fin, pues aquí comienza una serie de entradas sobre las películas planeadas para éstos días. Son el resultado del proyecto Películas Bicentenario organizado por el IMCINE.
Chicogrande (Felipe Cazals,2010)
1916. Villa está herido y escondido en la sierra de Towhi. Se ha retirado ahí después de atacar el pueblo de Columbus. Los estadounidenses entran a México para atraparlo apoyados por el ejército carrancista. Bueno, apoyados, apoyados, no realmente, más bien no les queda remedio. Son las "Expediciones Punitivas". El Mayor Butch Fenton (Daniel Martínez) es el encargado de encontrarlo y se dedica a torturar y amderentar a los pueblerinos para que le digan el paradero de Villa. Juan Manuel Bernal es el médico gringo que tiene serias dudas sobre lo que está haciendo ahí. Chicogrande (Damián Alcázar) es uno de los hombres de Villa que se quedó a su lado y que decide bajar a pueblo a buscarle un doctor. Así más o menos la historia. Algunos ayudan a los gringos, pero la mayoría tiene miedo y desconfianza. Los gringos tratan bastante mal a los mexicanos, y estos ven con desprecio a los apaches que van a ayudar a rastrear a Villa.

Grandes paisajes, escenas un poco a lo western, buenas actuaciones. Demián Alcázar está muy bien, Daniel Martínez de Buth Fenton también, en general. Juan Manuel Bernal tiene la voz doblada y eso me desesperó un poco. Pero la película en general me resultó aburrida. Es lenta. Trata de pintar una atmósfera, que se vaya conociendo a los personajes del pueblo, a los militares, distintas visiones de la revolución. Pero no está logrado. Hay escenas que sobran como esa en la que sale Lisa Owen de gringa, que me parece que es sólo para que se vea que hay una gringa perdida y cómo el Fenton no la trata igual que a los demás. Pero no va a más. Sale Bruno Bichir en un papelillo como de chivato, pero tampoco va a más. Las mejores escenas y las que más hablan de lo que pasa son con el Viejoreséndez, el doctor mexicano y el último diálogo de Chicogrande. Y hablando de Chicogrande, pues que luzca más, que se sepa más de él, de su lealtad, de su valentía. La película está a su nombre, pues.

El uso de flashbacks para ilustrar algunas de las experiencias de los personajes, está bien. Pero el director sólo usa dos. Y más bien parecen llena-minutos, en vez de ser una parte ilustrativa importante de la guerra, del poderío de Villa y de por qué la gente creía en él, o no. Y la última parte de la película es bastante dispareja. Cambia el ritmo, ocurren cosas que no parecen congruentes con los personajes, hay una escena cuasi-cursi, y otra con un caballo mega inteligente.
La música no me gustó para nada. Es como de thriller, intensa, misteriosa y saca de onda con el escenario y lo que está ocurriendo, pero no de una manera positiva.
No me pareció mala, pero tampoco me interesó. ¿Y? Piensa uno al final.

martes, 31 de agosto de 2010

Caos Calmo

Los hermanos Pietro y Carlo están en la playa pasando el rato cuando oyen gritos de ayuda. Dos mujeres se están ahogando y la gente las mira desde la playa sin hacer nada. Ellos se lanzan al agua y las salvan. Nadie les agradece y ellos regresan a su casa muy desconcertados, para encontrarse con una escena aún más desconcertante. La esposa de Pietro está en el suelo, muerta. Su pequeña hija lo ve y le pregunta que en dónde andaba. Creo que es esta pregunta lo que provoca la reacción de Pietro ante la pérdida de su mujer.

¿Cómo reacciona la gente ante la pérdida? Hay quien llora y saca todo, hay quien se bloquea, hay quien lo guarda para luego, unos se concentran más en sus trabajos, otros se deprimen terriblemente y se quedan en cama. Hay quien retoma su vida rápidamente y hay quienes necesitan años.

Pietro (Nanni Moretti, que es además uno de los guionistas) se queda solo con su hija. Está medio alucinado, la tiene que peinar, llevar a la escuela, pensar en la comida y la cena, no se sabe los nombres de las maestras ni de las mamás de los amiguitos. Pietro no sabe cómo continuar, siente una fuerte necesidad de proteger a Claudia (la hija), quiere estar seguro de que está bien. La lleva a la escuela y la espera en el parque de enfrente hasta que ella sale. Pasan los días y eso se convierte en una rutina. Trabaja en una banca del parque, habla por telefono tomando un almuerzo en un café cercano, recibe a sus amigos y colegas. Y se convierte en parte del mundo del parque. Cada día juega con el niño con síndrome de Down, observa a la chica que pasea a su perro, platica con las mamás en el cafecin.

Esto es lo que más me gustó de Caos Calmo (Antonello Grimaldi, 2008). Esa placidez en el parque y lo que ve. La vida sencilla, el niño y la alarma del coche, las pláticas con el dueño del café, el que un vecino lo invite a comer a su casa. Pietro sana poco a poco, retoma las riendas de su trabajo, tiene hasta una promoción, pero dejar el parque, dejar esas mañanas no es fácil, tiene que ser Claudia la que le diga que ya está bien, que ya puede ir a su oficina, que los chicos de la escuela se empiezan a burlar. Pietro entiende, de alguna manera se libera y continua con su vida.

La película está bien en general, sin embargo hay aspectos de la historia que sobran un poco, como la escena en la casa de la playa. Es comprensible una escena en ese lugar para superar el trauma, pero la solución de ésta, me pareció fatal. Y que además eso estuviera relacionado con todo lo que estaba pasando en su trabajo, pues aún peor. Y todo lo relacionado al trabajo es como una parte poco desarrollada de la historia. Creo que hasta un poco sobrada.

Sé que ésta no la dirigió Nanni Moretti, pero parece como que sí, muy de su estilo, pero con él un poco más contenido. Y con sus películas siempre siento que algo se queda a medias, nunca me convencen del todo.

Me gustan las películas chiquitas, con historias sencillas, unos cuantos personajes y buenas escenas. Ésta iba por ahí, pero como que creció un poco y ya no cuajó bien.

domingo, 29 de agosto de 2010

Salt

Una agente de la CIA es acusada de ser una espía rusa. La agente huye, pero no para demostrar su inocencia como ocurre en la mayoría de las películas de este tipo. Esta agente huye porque intuye (no queda claro cómo, aunque las intuiciones suelen ser oscuras e inexplicables) que su esposo está en peligro. Luego resulta que sí que es espía rusa (yo estaba segura que ser espía ruso en el cine ya era algo pasado de moda), de esas que entrenan cuando son niños y luego integran a la sociedad y no saben que son, hasta que algo o alguien los despierta. En otras películas y programas, estos espías tienen conflictos y en realidad son buenos y terminan no siendo espías malvados, pero aquí, la única motivación de Salt es encontrar a su esposo. No le intresan los gobiernos, sus políticas, el dinero o el control del mundo. Sólo el maridin, y es difícil de explicar, porque está lejos de parecerse a Brad Pitt. No tiene el menor chiste ni importancia, no hay nada de química y no es creíble que Angelina Jolie se haya enamorado de ese tipo. Y ya que esa es la motivación principal del personaje, resulta bastante irritante y hace aún más tediosa la película. Que si hasta ahora no he dejado claro, es mala.
La Agente Salt (Phillip Noyce, 2010) está muy mal contada, con escenas de acción y diálogos de lo más comunes, y Angelina Jolie no está bien aprovechada. Eso de ponerle tres "looks" distintos, dos cortes de cabello, sombreros exóticos, ojos de distinto color y dientes falsos, no es aprovecharla. A mí sí me gustó de Lara Croft (claro que no soy fan del juego, ni nada), y aunque Wanted no me gustó mucho, creo que ella sí puede ser una buena actriz de acción. Y además de todo, está completamente inexpresiva, no sé si porque es espía rusa o porque estaba aburrida. Me pregunto qué la habrá motivado a hacer esta peli. La paga, me imagino, porque no parece haber nada más. Yo que ella, me hubiera quedado a cuidar a mi montón de hijos que a perder el tiempo con esto.

La historia es escasa y poco original, la acción, los balazos y las patadas, son muy irregulares. Y está llena de pequeños detalles de esos que lo hacen a uno romper la regla de no hablar en el cine. Como el asunto de la mochila con perrito y la mochila sin perrito. Esta mochila en cuestión es una que tiene preparada para cualquier contingencia, está llena de armas y cosas útiles para una graciosa huída, entre las cosas que contiene es un frasco con arañas. ¿Será que cada día las saca a que tomen el sol y las guarda de nuevo? ¿Será que las tomó en el momento pensando que le podían ser útiles? ¿O acaso las arañas formaban parte del plan inicial? Mmh, tal vez las compró de pasada en una tienda y no nos enseñaron ese detalle sin importancia.

Y de risa resulta el encuentro final entre los dos protagonistas. Toda esa escena final en el búnker presidencial es realmente mala. La manera en que Salt baja al búnker, el diálogo a través del vidrio de un ladrillo de ancho, la apertura de la puerta rompiendo la pared, las pistolas voladoras, las miradas asesinas. Y si así es la seguridad del búnker de la Casa Blanca, yo que ellos, lo reforzaba de inmediato.
La vuelta de tuerca apesta y el Presidente de los Estados Unidos, es uno de los más malos en la historia del cine, pero no malos de malévolos sino de chafas.

Ocurre con frecuencia en películas de acción, que no importa mucho que no sean tan buenas porque las patadas y los balazos valen la pena, o el protagonista es un buenazo en las artes marciales y ya eso en sí es un buen show. Aquí, tristemente, la Agente Salt, no es interesante, no amerita segundas partes, y no es el equivalente femenino a Jason Bourne. A nadie le importa quién es Salt.

martes, 17 de agosto de 2010

Los hombres que no amaban a las mujeres

Los hombres que no amaban a las mujeres (Niels Arden Oplev, 2009) es la historia basada en el exitosísimo primer libro de la trilogía de Millenium de Stieg Larsson.

Es una historia de misterio, truculencia y mucho suspenso. Con un poco de historia, nazis, desapariciones, crítica social y muchos personajes que se entrelazan.

Mikael Blomkvist es periodista y editor de la revista Millenium. Por uno de sus reportajes se mete en líos y va tener que pasar un rato en la cárcel (una cárcel envidiable y muy civilizada, por cierto). En lo que eso sucede y para poner un poco de distancia con la revista y los periodicazos, decide aceptar un trabajo de investigación de un reconocido empresario que quiere que le averigüe quién de sus familiares mató a su sobrina hace más de 30 años. Mikael empieza a trabajar y poco a poco se va adentrando en la oscura historia de la familia Vanger. La vida de Mikael se entrelaza con la de Lisbeth Salander, cuando se da cuenta de que su computadora ha sido hackeada por ella. Mikael reconoce sus habilidades de investigación y le pide ayuda. Ella duda, pero acepta renuentemente porque como ha seguido los descubrimientos de Blomkvist, siente curiosidad por el caso. La historia es mucho más complicada, pero no voy a arruinarles la película, así que hasta aquí de sinopsis.
Siempre es difícil poner distancia entre las películas y los libros que las originan. Es inevitable hacer comparaciones, criticar cuando cortan la mitad de la novela o malinterpretan completamente a los personajes. Y en la mayoría de los casos, sobretodo cuando ha pasado poco tiempo desde la lectura del libro, uno sale con un cierto aire de decepción.
Esta película no me decepcionó en relación al libro. Creo que es de los mejores guiones adaptados que recuerdo en estos momentos. Mantiene la historia más importante y corta las subtramas y los personajes secundarios. Se extrañan, por supuesto, pero se entiende perfectamente que no podía caber todo el libro en dos horas y media. El ambiente, los diálogos y las secuencias de tiempo están muy bien logrados. Probablemente el ritmo parezca lento a muchos, pero a mi no me afecta el estilo más pausado de este cine no hollywoodense. Tal vez sea casualidad, pero el libro también empieza lento y ya para la segunda mitad cobra mucha velocidad.

Un problema de haber leído el libro es que como uno ya sabe de qué va la historia, es difícil saber si la manera de resolverla, de narrarla es clara y efectiva para los que no la han leído. Así que no estoy segura de si las últimas pistas, estuvieron bien ilustradas.

Lo que sí que no me convenció para nada fue el reparto. Ninguno salió como me los imaginaba. Sobretodo Erika Berger y Mikael. Mikael (Michael Nyqvist) se supone que es muy guapo... Y Lisbeth tampoco me latió al principio, pero para la mitad de la película me reconcilié con la actriz (Noomi Rapace). No me la imaginaba así, pero esta otra opción no está mal.

Espero con ansia que estrenen el resto de la trilogía. También me acabo de enterar de que hay una serie de televisión. Me imagino que continúa en donde se queda la última peli. Así que que tengo que empezar a buscarla para bajarla porque es poco probable que llegue a la tele normal. O nos harán como con la serie de Wallander, que sí llegó, pero la de la BBC con Kenneth Brannagh que es un chillón y no funciona para nada como Kurt Wallander. Pero divago, bueno no tanto, todo esto es porque me he enterado de que los gringos están planeando un remake de esta película. Arghh. ¿¿Por qué?! ¡¿Por quéeeeee?! Me chocan los remakes, y más cuando se hacen con la otra película (europea o asiática exitosa generalmente) tan presente y tan reciente en el mundo. Sólo para aprovechar el mercado, cual cazagoleros. Lo peor es que es probable que más gente la vea, que más éxito tenga y que rápidamente se olvide el mundo de la original. Y sólo porque el público está hecho al cine gringo y el resto le resulta ajeno, raro, lento, complicado. En vez de aprovecharlo como una ventana a mundos desconocidos, como una manera de aprender nuevas cosas, de conocer nuevas visiones, maneras distintas de hacer y entender el cine. "Ah no, yo me espero a la gringa" Seguro que va a tener mucha más acción, los actores van a ser súper guapos (¡Daniel Craig!) y va a ser visualmente más, mucho más espectacularmente truculenta porque la va a dirigir aparentemente, David Fincher. Y para colmo de colmos se va a llamar "The Girl with the Dragon Tatoo", igual que como le pusieron en inglés al libro y que no es realmente lo importante del libro, pero seguro es un título que atraerá a las masas, porque el otro, al parecer, puede asustar a muchos hombres. Argh y doble argh...

Frozen River

Ray Eddy descubre que su esposo se ha fugado con el dinero para la nueva casa tráiler. El vendedor le da una última oportunidad de hacer el pago el día de navidad. Ray no tiene idea de dónde va a sacar esa cantidad. Trabaja en un supermercado y apenas gana para vivir y darle de comer a sus dos hijos. TJ, que tiene como 15 años, se ofrece a buscar un trabajo para ayudar, pero ella le dice que no, que su obligación es ir a la escuela y cuidar de su hermanito. Eddy va a buscar al marido, que es jugador conmpulsivo, al bingo local. No lo encuentra, pero sí encuentra su coche. El coche en cuestión se lo ha agenciado una empleada del bingo que vive en la reserva Mohawk. Eddy va a por su coche, Lila no se lo quiere dar, le ofrece un trato, y ahí comienza la historia. Una historia de contrabando de ilegales de un lado a otro de la frontera, a través de un río congelado. Una historia de racismo y desconfianza: Lila sostiene que no las van a detener porque Eddy, que es blanca, va manejando; Eddy no quiere llevar pakistaníes en la cajuela porque qué tal si son terroristas, etc.

La película ocurre en algún pueblillo cerca de la frontera con Canadá, a unos pasos de la reservación Mohawk. El lugar es pobrísimo, frío e inhóspito, lodoso.

Frozen River (Courtney Hunt, 2008), no es una peli alegre, optimista, que levante el espíritu, o que tenga una moraleja al final. Es bastante sombría, de hecho. A Eddy le va del asco, hay días en que les da de comer a sus hijos palomitas y tang, se van a llevar la tele (extraños contrastes, pues es una tele grande de pantalla plana). No parece tener vida social, familia, amistades. Sin embargo Eddy no se rinde, no se queja, no pierde el control, ni se enoja. Tiene una meta, que es conseguir la casa para navidad, y lo va a lograr, aunque se meta en líos. Y también es la historia de Lila. Lila, que no mantiene un trabajo estable, es sospechosa de traficar con ilegales, y no es bien vista entre los miembros de la reservación. Lila tiene un bebé pequeño que le fue arrebatado por la abuela paterna y no se lo deja ver. Lila trafica y guarda el dinero para su bebé, pero es rechazado. Y la relación entre ellas no es para nada uno de esos lazos a la "Thelma y Louise", pero es real y solidario.

Y así son las cosas, no hay explicaciones de más, no hay melodrama (aunque la situación sea muy dramática). La vida sigue, los días pasan, no hay más.

No es el tipo de películas que de entrada me llamen la atención. Siempre trato de huir de las pelis potencialmente deprimentes, pero así como trato de huir de las pelis malas de adolescentes gringos, siempre hay algo que me llama, una curiosidad, el título, algún actor, algo de la trama, o hasta el soundtrack. En este caso fue la nominación al Oscar para Melissa Leo como mejor actriz, y para la directora al mejor guión. Me tardé un rato en decidirme a verla, y no me arrepiento de finalmente haberme animado. La película me atrapó rápidamente, y aún sabiendo que no podía acabar bien (con ese título, ¡imposible!), terminé de verla, sin por un momento perder el interés.

lunes, 9 de agosto de 2010

Grown Ups

Cinco amigos se reunen en el funeral del entrenador de básquetbol de su infancia. Hace mucho que no se ven y deciden pasar un fin de semana en una cabaña con sus familias. Y hasta ahí la cosa.
Adam Sandler está casado con Salma Hayek que es una mamona y exitosa diseñadora de modas. Chris Rock está casado con una mandona Maya Rudolph y es el amo de casa. Kevin James está casado con Maria Bello que todavía amamanta a su hijo de 4 años. David Spade no está casado y la hace de David Spade, y Rob Schneider está casado con una señora mmmuy mayor, usa peluquín y como le dice Adam Sandler, parece como si Elvis fuese un Oompa Loompa.
Es una de esas películas de reencuentro y nostalgia y sobre el crecer y ser adulto, sobre el madurar (o no), sobre la infancia, los recuerdos... Bueno, pretende ser sobre todo esto, pero no creo que lo haya logrado.

La verdad es que me reí mucho, tiene frases muy divertidas, (como cuando le dicen a Salma "Spicy Quesadilla" o cuando al Y le preguntan en dónde está MCA), se nota que hubo mucha improvisación y que los tipos disfrutaron el duelo de chistes. Me los imagino así en la vida real. Y son buenos para eso. Seguro que dejaron fuera un montón de chistes y comentarios. Los extras del DVD estarán buenos.

Pero la peli dista mucho de ser buena. Está llena de escenas previsibles y obvias, unas dan risa, otras no. Salmita está muy forzada (su paso de fría y controladora a cálida y buena onda, es poco creíble, y sí creo que le sale bien la comedia, por lo menos recuerdo que en la de Fool's Rush In está bien). La escena con el tipo guapo de la alberca resulta tan obvia que ni risa da, en cambio no importa que sepamos lo que va a ocurrir con Steve Buscemi en la tirolesa porque aún así se ríe uno. Otra escena divertida es la de la alberca y el pipí, pero la ponen en el tráiler y además la repiten dos veces, así que pierde fuerza.

Son como niños (Dennis Dugan, 2010), está escrita por Sandler y Fred Wolf, escritor de Saturday night Live. Y parece eso, una reunión de antiguos miembros del show, una peli de cuates y para lucir a los cuates. Los actores no están bien integrados. A cada uno le tocan escenas para lucir su estilo personal. Y todos son como los hemos visto tantas veces. No hay sorpresas por ese lado, tampoco se ve una evolución ni nada. Lo que sí que fue una decepción fue la falta de presencia de Chris Rock, que de todos estos es mi favorito y hace mucho que no salía en una película. No tiene escenas propias, ni diálogos desatados como los de sus shows. ni nada de nada. Es un personaje bastante menor. Hubiera preferido más peso suyo y mucho menos de David Spade, que me irrita y no se me hace nada gracioso.

No importa que la historia sea sencilla (o prácticamente inexistente) y que sea únicamente para lucir a una serie de actores y para sacar un chiste tras otro...si hubiera mantenido ese ritmo, chiste, chiste, chiste. Desgraciadamente no ocurre así. Sandler además, pretende dar un mensaje, con eso de que sus niños no están disfrutando su niñez, no saben jugar y bla, bla bla, pero no lo aprovecha, se queda corto en las escenas con ellos. Había tantas posibilidades y se reducen a lanzar piedras en el agua y al teléfono de vasito.
Y como en todas sus películas no pudo faltar el momento emotivo, el de pedir disculpas y todo eso; pero la escena es malísima, lenta, poco fluida y graciosa, sólo faltaron las risas grabadas del público.
Repito, me reí mucho, pero definitivamente ayudó la compañía, el mood y que ya sabía a lo que iba.

lunes, 2 de agosto de 2010

Capitalism, a Love Story

Vivimos en un mundo gandalla, donde el que no transa no avanza, en donde amasar una fortuna es el sueño máximo. Es de rojillos, o de hippies, o de losers el pensar que no es necesario tener cinco o diez coches deportivos y una mansión con enormes cuartos que nunca se van a habitar.
Soy ingenua, lo sé, cada vez que pienso en estos temas y en que no es justo que las empresas abusen y expriman a sus empleados. ¿Cómo es posible que haya empresas que sacan seguros de vida de sus empleados y obtienen una lana cada vez que uno de ellos se muere? ¿Por qué no hay más empresas como esa de robótica en donde os empleados son los dueños y todos opinan y votan, o como esa de pan en donde el CEO no entiende eso de tener más dinero del necesario para vivir bien?
Como cada vez que veo un documental de Michael Moore, me impresiono, me irrito, me deprimo. Y es que aunque ocurra en Estados Unidos y el punto de vista sea de allá, hay cosas que funcionan igual acá. Y si a eso le añadimos nuestra corrupción, pobreza y falta de oportunidades...
Capitalismo, una historia de amor (Michael Moore, 2009), trabaja sobre la misma línea que la película de "Roger and Me" que filmó hace cerca de veinte años, sólo que corregida y aumentada, pues no se limita a una empresa y un pueblo. Aquí examina cómo el dominio corporativo rige y controla las vidas de los norteamericanos. ¿Cómo es posible que familias se queden sin casa por no poder pagar sus deudas al banco, y el gobierno "salve" a los bancos con los impuestos de la gente? ¿Cómo es posible que empresas tengan que cerrar y despedir a sus empleados sin pagarles lo que les deben, cuando los bancos acaban de recibir millones de dólares de parte del gobierno? Estos y más alucinantes contrastes aparecen en este documental. ¿Qué rige a los gobiernos, la democracia o el capitalismo? ¿La justicia o la avaricia? Es mejor declarar empresas en bancarrota y correr a miles de empleados para obtener dinero rápido. Se beneficia a los palancudos, se ignora a los pobres. Nada de esto es nuevo, y una película no solucionará el problema, obvio que no. Pero al menos intenta decir algo, despertar conciencias, de perdida nos hará hacer corajes. Por lo menos algo de polémica generará y eso ya es algo en este mundo apático.
Siempre temo, con las películas de Moore, que le gane el protagonismo, su tirria hacia Bush o que se desvíe de su tema central. Le pasó en Farenheit 9/11 y un poco en Sicko. Pero creo que aquí se contiene y no pierde el hilo. Como siempre tiene partes muy dirigidas y manipuladoras, pero aún así, en general es una de esas pelis obligatorias y necesarias. Además, ¿cómo no compartir esa sensación de victoria de los empleados en Chicago y emoción cuando la gente les mandó comida, o de la familia que se plantó de nuevo en su casa con el apoyo de sus vecinos? ¿Cómo no sentir la impotencia de los que perdieron su granja y además, tuvieron que ponerla coqueta para los nuevos dueños?
Tiene un par de escenas divertidas y muy suyas, Moore va a los principales bancos con un camión blindado y pide que le den los millones de dólares que el gobierno les dio para devolverlo. Ante la ignorancia de los banqueros, Moore pone cinta amarilla de esa que dice "Crime Scene, do not cross" es todos los edificios.
Y una cita que guardaré para las trivias de cine: Cuando Moore va a Wall Street y les pregunta a los empleados si tienen sugerencias para él, y uno de ellos le dice "Sí, no hagas más películas".
Ahora me gustaría ver una peli sobre el periodo Obama, ¿será objetivo? ¿será capaz de analizarlo y criticarlo como lo hizo con el periodo Bush? La peli lo pinta como"El Cambio", como el inicio de una nueva era, llena de cosas positivas para la gente. Por lo que se ve ahora, no está resultando tan sencillo, un Nóbel a la nada, petróleo en el mar, problemas de salud y de migración. El tema da, sí que sí.
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