Jodorowsky's Dune cuenta la increíble y fascinante historia sobre la planeación de la película de Dune basada en la novela de Frank Herbert.
La increíble y fascinante historia de una película que nunca se filmó.
Al inicio, varios de los entrevistados platican que al conocer el proyecto, al ver el libro que se hizo con todas las ideas, llegaron a la conclusión de que la película iba a ser fenomenal. Después de ver este documental yo también llegué a la misma conclusión. Y más aun porque acabo de ver el Dune de 1984 dirigido por David Lynch y... ¡cómo me hubiera gustado ver esta de Jodorowsky!
En 1975, tras el éxito de sus peculiares películas en México, fue invitado por el productor Michel Seydoux para hacer una película. Jodorowsky eligió Dune, según esto así nomás sin haber leído el libro.
Con todo el apoyo de los productores hizo el guión y empezó a buscar a su equipo de trabajo. Con un montón de suerte y confianza en el proyecto logró la colaboración entusiasta de Jean Giraud/Moebius, un escritor y dibujante de cómics estupendo, para hacer el story board y todas las imágenes para recrear la historia; se trajo de EUA a Dan O'Bannon para los efectos especiales, a Pink Floyd y a Magma para la música, a H.R. Giger y a Chris Foss para el diseño de naves, y sets. Se encaprichó con Dalí como el emperador, David Carradine como el Duque Leto Atreides, Mick Jagger le dijo que si, al papel que en la película de Lynch hizo Sting. Quiso a su hijo como Paul Atreides y lo mantuvo entrenando durante dos años en distintos estilos de artes marciales. Y para el Barón Harkonnen eligió nada más y nada menos que a Orson Welles
Jodorowsky estaba convencido de que tenía entre manos un proyectazo y logró convencer a un talentosísimo grupo de colaboradores. A quien no logró convencer fue a los productores norteamericanos. Les gustaba el proyecto, pero no el director. Esta es una parte amarga porque después de ver las cosas increíbles que planificaron, después de saber que ya estaban todos listos para ir a filmar a la locación, nada de nada.
No es spoiler el decir que la película no se filmó, sí se siente como spoiler al principio, pero las conclusiones finales y lo que ésta no-película ha significado el cine de ciencia ficción posterior, le restan esa sensación y le dejan a uno con un wow. Este proyecto ha dejado muchas cosas, Alien, por ejemplo. Ha influenciado a muchos; y Jodorowsky, que dejó de filmar, se dedicó a hacer cómics que de alguna manera son una extensión de su Dune.
El proyecto ahí sigue para quién esté interesado en retomarlo. Además de que la historia en sí me ha gustado mucho, me pareció muy interesante la capacidad de Jodorowsky de juntar un equipo, reconocer, respetar sus cualidades y motivarlos hasta lograr un proyecto complejo y congruente.
Con todo el apoyo de los productores hizo el guión y empezó a buscar a su equipo de trabajo. Con un montón de suerte y confianza en el proyecto logró la colaboración entusiasta de Jean Giraud/Moebius, un escritor y dibujante de cómics estupendo, para hacer el story board y todas las imágenes para recrear la historia; se trajo de EUA a Dan O'Bannon para los efectos especiales, a Pink Floyd y a Magma para la música, a H.R. Giger y a Chris Foss para el diseño de naves, y sets. Se encaprichó con Dalí como el emperador, David Carradine como el Duque Leto Atreides, Mick Jagger le dijo que si, al papel que en la película de Lynch hizo Sting. Quiso a su hijo como Paul Atreides y lo mantuvo entrenando durante dos años en distintos estilos de artes marciales. Y para el Barón Harkonnen eligió nada más y nada menos que a Orson Welles
Jodorowsky estaba convencido de que tenía entre manos un proyectazo y logró convencer a un talentosísimo grupo de colaboradores. A quien no logró convencer fue a los productores norteamericanos. Les gustaba el proyecto, pero no el director. Esta es una parte amarga porque después de ver las cosas increíbles que planificaron, después de saber que ya estaban todos listos para ir a filmar a la locación, nada de nada.
No es spoiler el decir que la película no se filmó, sí se siente como spoiler al principio, pero las conclusiones finales y lo que ésta no-película ha significado el cine de ciencia ficción posterior, le restan esa sensación y le dejan a uno con un wow. Este proyecto ha dejado muchas cosas, Alien, por ejemplo. Ha influenciado a muchos; y Jodorowsky, que dejó de filmar, se dedicó a hacer cómics que de alguna manera son una extensión de su Dune.
El proyecto ahí sigue para quién esté interesado en retomarlo. Además de que la historia en sí me ha gustado mucho, me pareció muy interesante la capacidad de Jodorowsky de juntar un equipo, reconocer, respetar sus cualidades y motivarlos hasta lograr un proyecto complejo y congruente.