¡Ahhhh, me encantó esta peli! Qué le vamos a hacer, ¡cero objetividad!
Wes Anderson es de mis directores favoritos, sus películas me gustan muchísimo, por el humor, lo estilizado y el increíble cuidado del arte, de lo visual. Me fascinan los personajes, extravagantes, neuróticos, únicos.
Isla de Perros tiene todo esto, es una joya. Sospecho que será mi película favorita del año; lo es hasta ahora, pero es que no ha habido nada interesante en cartelera.
En un Japón ficticio, en un futuro cercano, en la ciudad de Megasaki, los perros se han enfermado. Aprovechando esta circunstancia y exagerándola, el gobernador Kobayashi decide mandar a todos los perros, caseros y callejeros, a la isla en donde se tira la basura. Ahí, los perros tendrán que ingeniárselas solos para sobrevivir. Un día llega una visita inesperada, un niño llamado Atari que busca a su perro Spots. La banda de perros que lo encuentra decide ayudarlo y así comienza una emocionante aventura llena de peligros, acción y amistad.
Wes Anderson trabaja nuevamente con su equipo de cabecera y junto con él Roman Coppola y Jason Schwartzman escriben el guión. Además, cuenta con un súper reparto para las voces. Bryan Cranston, Bill Murray (no podía faltar), Edward Norton, Scarlett Johansson, Greta Gerwig, Jeff Goldblum (el perro que cuenta rumores, ¡buenísimo!), Tilda Swinton (es la voz del perro más extraño de todos, no les digo porque segurito que adivinan), Liev Schrieber, F.Murray Abraham, y uff, muchos más. Y como detalle extra cagado es el personaje de la asistente científica Yoko Ono, cuya voz la hace la mismísima Yoko Ono.
La animación es stop-motion, con el mismo estilo que su película del 2009 "Fantastic Mr.Fox" y combina partes con animación de dibujitos muy japonésidos, pero no como anime, sino como manga animado, o como el diseño de las envolturas de productos japoneses. Está súper padre. Y si a eso le agregamos la increíble música de Alexandre Desplat, que tiene como ingrediente principal los tambores japoneses taiko, pues uuuuuuff!
Estamos en una época un poco extremosa en donde apreciamos o no las cosas, en este caso en particular el arte y el cine, por cuestiones ajenas a la obra en sí. Leo y escucho reseñas con mucha frecuencia y estoy un poco harta de esto. Si en la peli salen mujeres protagónicas, es la neta, si además estas pertenecen a una minoría, la doble neta, y nadie cuestiona o se atreve a cuestionar si la película en sí vale la pena, está bien hecha, es interesante, o si de perdis las mujeres en cuestión actúan bien. Otro ejemplo tiene que ver con quién hace las historias, que si un blanco dirige una película con negros, le ponen pero, ¡¿pero si la idea fue del director blanco?! Parece que no vengo al caso y que divago, pero no tanto, es que en este caso, escuché una reseña en donde el pero era porque los elementos japonésidos que utilizó Wes Anderson son elementos provenientes de una visión occidental del Japón. Un Japón que no es así. Y me irrita porque no entiendo el problema ¡es su peli! su universo, ¡su idea! Y no es falta de respeto a Japón, yo lo encontré como un homenaje a cosas geniales. Una admiración por el arte, el diseño, el minimalismo, la comida (esa corta escena en donde preparan la bento box para uno de los personajes es una de mis favoritas). No sé ni me importa lo que piense un japonés, creo que si es listo entenderá y apreciará la historia por lo que es y no por su precisión cultural.
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